Dos familias neuquinas atravesaron una experiencia que combina dolor y esperanza en el Hospital Italiano de Buenos Aires. Luca, de dos años, falleció tras recaer de un trasplante de hígado, pero se convirtió en el donante de corazón para Felipe, su vecino de habitación de solo un año, el 18 de junio de 2025.
Ambos chicos llegaron al hospital con cuadros graves y se conocieron en noviembre pasado. Felipe estaba conectado a un corazón artificial tras una severa miocardiopatía, y había sufrido un ACV y un paro cardíaco. Luca, que también había sido trasplantado antes, terminó siendo la esperanza para su amiguito tras su triste partida. “No sabíamos si su corazón iba a poder donarse, pero era lo que más fuerte tenía”, contó
Nicolás, el papá de Luca.
Trasplante histórico en Argentina
Este procedimiento marcó un hito: por primera vez en el país se realizó un trasplante cardíaco infantil por donación en asistolia controlada, es decir, cuando el corazón ya no late. Hasta ahora, esa técnica solo se había hecho en España y Australia. El presidente del Instituto de Trasplante de la Ciudad de Buenos Aires, Carlos Cichero, explicó: “Es la primera vez en Argentina que se coloca un corazón que no está latiendo”.
La intervención, cargada de emoción, incluyó un encuentro entre ambas familias: “Ustedes le salvaron la vida a nuestro hijo”, agradecieron los papás de Felipe a los de Luca. Paula, la mamá de Luca, expresó: “Me llena saber que la vida de Luca sigue en Feli”.
Fuente: El Doce (link).