Donald Trump y Elon Musk se cruzaron fuerte y se terminó la alianza política que los mostraba juntos: el quiebre, con acusaciones graves y diferencias de fondo, pone en jaque al eje del gobierno conservador en Estados Unidos.

Ruptura a lo grande

No es novedad que Trump despida funcionarios y que estos salgan a denunciarlo. Pero la ruptura con Musk es otro nivel: el magnate sudafricano mostró videos que probarían una vinculación de Trump con Jeffrey Epstein, sumando más dudas a su historial de denuncias de abusos y pagos a estrellas porno como Stormy Daniels.

Más que política, negocios

Este divorcio explosivo pone en crisis la fórmula que el Partido Republicano vendió en la última campaña: Trump-Musk, una dupla inédita entre política y empresariado. Eso votaron millones, ahora ese eje político está roto.

¿Por qué pasó? Las diferencias políticas siempre estuvieron, pero las económicas pesaron más. Musk apuesta al poder empresarial, pide menos impuestos y más subsidios para la tecnología, mientras que Trump es pragmático y proteccionista. Nadie en el entorno parece realmente convencido de la versión oficial del motivo del quiebre.

Impacto global (y local)

La pelea deja incómoda a la elite conservadora y al propio Javier Milei, presidente argentino que supo adular a ambos y ahora tendrá que hacer equilibrio entre los dos. Ideológicamente, Milei está más cerca de Musk, quien recibió como regalo la famosa motosierra de los recortes presupuestarios, aunque eso golpee fuerte a los sectores más vulnerables.

Fuente: El Doce (link).