Por Facu García

El auto no estuvo a la altura en ningún momento del fin de semana, ni en pruebas libres, ni en Qualy (con destellos de buenos tiempos de vuelta), mucho menos en la carrera. Tanto el monoplaza de Franco Colapinto como el de Pierre Gasly dejaron en evidencia una estructura en caída libre. Puesto 13°para el francés y 15° para Franco, que ni si quiera con 4 autos OUT por accidentes y desperfectos (Verstappen, Sainz, Albon y Antonelli), pudieron sumar puntos.

La parada de casi 4 segundos en boxes es apenas una muestra del desconcierto general. Dos pilotazos intentan sacar adelante un proyecto que no responde en lo estratégico, en lo técnico ni en lo operativo. Un ejemplo claro es el piloto brasileño Bortoleto, que hizo lo que había que hacer: tenía un auto decente, acompañado de un buen piloto los resultados llegaron. Así funciona este deporte.

El mismo Flavio Briatore, autoridad de Alpine declaró que es “preocupante el resultado del equipo francés este fin de semana”, ojo, haciendo referencia al auto, no a los pilotos.

Lo de Alpine ya no es solo una mala racha. Es una crisis deportiva e institucional. Hoy, sin rodeos, el peor equipo de la parrilla. Y lo más preocupante es pensar si no terminarán apagando el talento de un piloto con enorme proyección como Franco.

¿Próxima parada? Silverstone, el 6 de Julio